Cinco bebidas que la mayoría de la gente considera inofensivas podrían estar dañando silenciosamente tu corazón. ¿Ese ritual diario que disfrutas sin pensarlo dos veces? Podría estar preparándote para graves problemas cardíacos en el futuro. Los ejecutivos de marketing han hecho un trabajo fantástico convenciéndonos de que ciertas bebidas son perfectamente seguras, incluso saludables. Alerta de spoiler: no todas son inocentes.
¿Esas bebidas azucaradas a las que recurres cuando tienes sed? Los estudios muestran que están asociadas con un 10% de mayor riesgo de fibrilación auricular cuando se consumen regularmente. Pero aquí está la sorpresa: las alternativas endulzadas artificialmente son aún peores, vinculadas a un riesgo 20% mayor. Sí, esa opción «diet» no te está haciendo ningún favor después de todo. Según el extenso estudio del UK Biobank que siguió a más de 200,000 adultos, estos hallazgos se mantuvieron consistentes incluso después de tener en cuenta la susceptibilidad genética a la fibrilación auricular. El estrés crónico puede empeorar las cosas ya que las hormonas del estrés liberadas en el torrente sanguíneo pueden alterar significativamente la regulación del azúcar en sangre y la función cardíaca.
¿Crees que la gaseosa dietética es amigable con el corazón? La evidencia sugiere que es incluso más peligrosa que la original azucarada.
Las bebidas energéticas merecen una mención especial en el salón de la vergüenza cardíaca. Repletas de cafeína y otros estimulantes como guaraná y taurina, estas inyecciones líquidas de adrenalina pueden desencadenar arritmias y otros problemas cardíacos. Hay casos documentados de personas que desarrollaron cardiomiopatía por beberlas regularmente.
Pero sí, adelante y «obtén alas». Tu corazón podría necesitarlas para revolotear hasta la sala de emergencias.
No todo es pesimismo, sin embargo. El café y el té, tanto negro como verde, realmente vienen con beneficios cardiovasculares. Sus propiedades antioxidantes pueden reducir el riesgo de ataque cardíaco y derrame cerebral. Solo no te excedas con la cafeína, obviamente.
En cuanto al alcohol, la moderación es la palabra mágica. Una o dos bebidas diarias para hombres (menos para mujeres) podrían ofrecer alguna protección cardíaca, especialmente si es vino tinto con esos elegantes antioxidantes. Cualquier cosa más allá de eso, y estás coqueteando con la hipertensión y las arritmias. El consumo excesivo de alcohol puede llevar a un trastorno del músculo cardíaco, específicamente cardiomiopatía, que debilita la capacidad de tu corazón para bombear sangre efectivamente. No exactamente una perspectiva romántica.
¿La lección? Lo que parece inofensivo a menudo no lo es. Tus elecciones diarias de bebidas se acumulan con el tiempo. La conciencia del consumidor sigue siendo sorprendentemente baja mientras estas bebidas gravan silenciosamente tu sistema cardiovascular.
Tal vez deberías repensar tu próxima bebida. Tu corazón te lo agradecerá, si todavía funciona correctamente.
